No sé cómo emprender

Las fases del emprendimiento

Buenos días chiquitos y chiquitas ;) 

Ayer hablábamos de cómo comenzar a emprender, vamos, lo que viene siendo organizarse, formar un plan, desarrollar la constancia y ser positivos, y sobre todo, aprovechar todo lo que somos para obtener dinero de ello (lo que sería antiguamente estudiar derecho y ser abogado o asesor legal).

Como bien sabemos, especialmente los jóvenes, las cosas no son necesariamente así hoy en día, y es por ello que muchos de nosotros emprendemos. Esta bien tener unas nociones guía, pero es más fácil, más visual ver lo que han hecho otros y aprender de ello.

Este post iba en otra dirección, pero al redactarlo me he dado cuenta de que existen fases en todo, y como amamos las listas, aquí dejo las fases que pasamos para emprender. 

1. Fase de desesperación
2. Fase de duda
3. Fase de reestructuración
4. Fase de construcción
5. SUCCESS!!!

No me considero un figura del mundo del emprendimiento, pero desde 2014 vengo haciendo cositas hasta que le he ido dando forma a los proyectos. Hoy os hablaré de las dificultades que fui encontrando en el camino (como la desesperación, la falta de medios o el desconocimiento) y cómo les fui dando remedio y aprovechándolas en mi beneficio.

Si alguien aún no lo sabe, soy historiador (huy qué es eso), y bueno, obviamente no iba a comer de eso recién licenciado (sep, soy de los que se licenció), al menos a corto plazo, así que fui pensando en qué podía hacer (fase de desesperación), claro, si quería vivir de eso tenía que coger becas (como la del Marq), hacer estancias de investigación, estudiar un máster, publicar, hacer un doctorado, etc. (la mayoría de las cosas requerían tiempo y dinero, bueno, tiempo "me sobraba", pero no el dinero. Para vencer esta primera fase de desesperación tuve que buscar mucho por internet que podía hacer, y resolví que quería formarme fuera de España, pero seguía sin dinero. En la Universidad de Alicante existen las becas Aitana, con las que me fui a una Biblioteca en la ciudad francesa de Montpellier, donde aprendía francés por segunda vez, esta vez mejor. Y me dio además algo de dinerito al volver a casa. 

Esta fase tiene un detalle, fue la primera vez que viví solo: ergo, cocinar solo, limpiar solo, hacer la compra solo y administrar el dinero solo. La fase de desesperación puede llegar lejos, pero HAY QUE MANTENER LA CALMA. Si somos poco organizados hacemos listas y tratamos de cumplirlas, eso nos hace ser organizados, y ser organizados es un requisito para emprender. 

Por qué es importante ser organizados? Por varias razones

1. Nos ayuda a visualizar las situaciones (los problemas y oportunidades).
2. Nos permite recordar los objetivos y cómo conseguirlos.
3. Nos tranquiliza saber qué tenemos que hacer.
4. Nos da satisfacción ir cumpliendo objetivos.
5. Porque cualquier empresa que no lleve control de gastos e ingresos va a morir antes de empezar.

Hoy hemos aprendido a lidiar con la desesperación poniendo orden y nociones de cómo poner orden en nuestros pensamientos, no importa lo oscuro que sean éstos, si seguimos adelante nos hace más fuertes. 

En las próximas ediciones veremos cómo afrontar y preparar las siguientes fases.

Si quieres compartir cómo afrontaste tu fase de desesperación deja tu comentario.